estoy solo viviendo en la calle

El Niño que vive en la calle

Alberto, un niño de 12 años de edad que vive en las calles, narra su testimonio:

Yo me fui de mi casa cuando tenia 7 años y nunca he regresado. Me fui porque mi padre me maltrataba mucho, me pegaba, llenaba un balde con agua y metía mi cabeza en ese balde hasta que yo me desesperaba y ya no podia respirar, mi madre también era golpeada duramente, pero a ella, no le importaba lo que mi padre hacía conmigo, no le importaba mi vida, ella tampoco me amaba.

Cuando me fui de mi casa, nadie me busco.

Ahora la calle es mi casa, para comer algunas veces me disfrazo de payaso y entretengo a la gente, otras veces mendigo y otras robo. Si, inhalo terokal (pegamento); algunas veces también pasta básica de cocaína. Tengo mis amigos de la calle, aunque verdaderamente no son mis amigos, son solo mis causas (pseudos amigos) para robar o drogarme.

No, no quiero nunca volver a mi casa, prefiero la calle.

Este es un típico ejemplo de un niño que vive en la calle.



Son niños que se han ido de su casa, que han cortado su vínculo familiar y que no quieren saber nada con su familia. Que han sufrido el dolor y menosprecio de sus familiares, que no han conocido lo que es amor y lo único que les queda es sobrevivir de cualquier forma.

# No son niños trabajadores, que después de trabajar todo el día en la calle vuelven a sus casas.

# No son niños que por determinadas circunstancias se han quedado huérfanos, sin padres, pero que sí anhelan tener una familia.



Estos niños, viven en forma inhumana, como topos ( en huecos ) o en parques, casonas viejas, basureros. Sucios harapientos, sin zapatos, mendigando y robando para subsistir en esta vida. Haciendo de la calle su hábitat.

Hacen del terokal (pegamento) un amigo que les da placer y los evade de la realidad.

Se han fugado de su casa muchas veces por el maltrato físico ( peligra su vida ) y/o maltrato emocional.

Cada día estos niños y/o adolescentes se esclavizan más en la droga, robo, violencia, sexualidad desviada y otros.

Sufren violencia física por pelear entre ellos y por el abuso de las autoridades.

Han sufrido violencia emocional desde su hogar y en la calle es peor aún, la gente los trata como la lacra, como algo inservible, un desperdicio para la sociedad. El 95% de las familias de los niños de la calle son de pobreza extrema.

aqui como un grupo estamos viviendo

 
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